Así titula la entrevista que se le hizo en el año 1994 al QH:. Otto Jensen para la Revista Masónica Venezolana por el QH Federico Landaeta.
Nacido en Copenhague, el 13 de diciembre de 1935, decidió venir a nuestra patria a tan corta edad. Corría el año 1956 cuando este joven, ya graduado de economista, pisa tierra maracucha para comenzar a trabajar de inmediato en una de las más prestigiosas empresas de computación del mundo. En Venezuela prosperó y aquí formo su hogar cuando conoció a una llanera de pura cepa, Luisa Margarita Loreto, su compañera fiel que le ha acompañado en las aventuras, tanto materiales como idealistas que el Il:. Y Pod:. Hmo:. Jensen ha emprendido en esta vida.
La vida masónica del Hn:. Jensen comienza el 14 de febrero de 1964. Día de los Enamorados, enfatiza.
La iniciación tuvo lugar en la Resp:. Logia “George Washington N° 100, cinco años más tarde estaría ocupando, por primera vez, la Veneratura de su Madre Logia; tres años después sería elegido Muy Sabio y Perfecto Maestro del Soberano Capítulo Rosa Cruz “Renovación” N° 72, cargo que ejerció durante dos períodos consecutivos. En 1988 fue el Gran Maestro del Iluste Consejo Kadosh de “Caracas” N° 1 y ese mismo año, después de 24 años de vida masónica activa recibió el Grado 33° en su condición de Supernumerario.
Otto Jensen, fue miembro activo de la Resp:. Logia Esperanza N° 7 del Este, adicional de ser miembro de la Resp:. Logia “George Washington N° 100, que trabaja (bajo dispensa oficial de la Gran Logia de la República de Venezuela) en el Rito Emulación, que es originario de Inglaterra, pero que se ha expandido universalmente. Los grados superiores del Rito York comienzan con el Capítulo de Real Arco y terminan en el Grado de Caballero Templario. En nuestro país existen dos Comandancias, una en Valencia y otra en Caracas, donde desempeñó el cargo de Eminente Comendador de los Caballeros Templarios.
¿A qué Grado del Rito Escocés Antiguo y Aceptado corresponde el de Caballero Templario? Preguntamos.
- En realidad, no hay equivalente. Pudiera decirse que es algo así como el Grado 33°, porque es el último Grado del Rito York, pero no es exactamente lo mismo… por eso no hay posibilidad alguna de hacer equivalencias o reconocimientos de uno a otro Rito.
¿Son muchos los Caballeros Templarios en Venezuela?
- No, solamente hay unos cincuenta en el país, pero ello no impide que su trabajo sea intenso y provechoso…A veces es preferible tener un grupo pequeño de integrantes estudiosos, activos y dedicados que comprendan cual es el verdadero trabajo que hay que llevar a cabo. La Masonería no es ningún club social a dónde acudir en busca de esparcimiento. Nuestra Institución es una Orden Iniciática que persíguela perfectibilidad del hombre…Y esa meta no puede lograrse sino se tiene una visión clara de sus fundamentos, si no se estudia con dedicación y si no se pone en práctica lo que se encontró en ella luego de haber transitado por lo menos parte del camino. La Masonería nos pide que debemos ser filantrópicos… que debemos ayudar a los desvalidos; como verdaderos masones estamos en la obligación de darle una mano aquel que éste sufriendo y resulta ilógico que no hagamos todo lo que esté a nuestro alcance para por lo menos tratar de calmar un poco el sufrimiento ajeno
¿Son pocos los QQ:.HH:.que llegan a comprender cuál es el verdadero sentido de la proyección masónica hacia la sociedad en que vivimos, especialmente en lo que atañe al servicio desinteresado en favor de aquellos que se encuentran en situación nada envidiables… ¿Por qué motivo, en su opinión no se hecho más en ese sentido a nivel nacional?
- La respuesta la dio usted mismo hace un momento…porque son pocos los que aceptan que el hombre tiene una obligación con su prójimo sufriente…Es muy raro encontrar gente dispuesta a quitarse un trozo de pan de la boca para dárselo a otro que no ha comido en todo el día…pero tal proceder noble constituye parte de las obligaciones del Mason…y no solamente con los propios “Masones”, sino con todo ser humano que se encuentre en la indigencia o en problemas transitorios de cualquier tipo. El Masón, al conocerse a sí mismo, debe reconocer que es parte inseparable del Gran Arquitecto del universo, y que el resto de la humanidad también lo es.
Q:.H:. Jensen, las páginas de la Revista Masónica se encuentran a su disposición para llevar su mensaje a la familia Masónica venezolana. Formule usted su mensaje.
- “Quisiera que mis Hermanos sepan que añoro la llegada del día que esta augusta y maravillosa Institución, regrese a su condición a la que pertenecemos, regrese a su condición de Iluminadora de la mente delo hombres, de colaboradora con los que sufren a efecto de aliviar sus penas, y de luchadora por la reivindicación de los oprimidos. Los Masones de hoy estamos en la obligación de trabajar sin descanso por el resurgimiento de la organización masónica que se ha caracterizado a través de la historia conocida, por ser adalid en la lucha por el respecto de los derechos de los pueblos.
La revisión o auditoria interna de todo organismo es sana. Al igual que se visita al dentista para detectar la existencia de caries o efectuar una limpieza, asi también debemos analizar nuestra relación para con la Institución.
Recomiendo que cada masón haga un examen de conciencia consuetudinario en lo atinente a su contribución individual.
Reformulemos la pregunta: En vez de indagar qué puede hacer la Masonería por mí, preguntemos ¿qué puedo hacer yo por la Masonería?
El QH:. Otto Jensen a sus 82 años, se mantiene firme a sus principios y valore masónicos y es un digno ejemplo a seguir por todos los masones de Venezuela.
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